Intrusismo en el sector de las páginas web en Salamanca

El desarrollo y diseño de paginas web es uno de los mercados donde menos se valora a los profesionales del sector.

Como ya hemos dicho en otro artículo de este blog: ¿Cómo se hace una página web? (páginas web Salamanca), son muchas las disciplinas que hay que conocer a fondo para la creación de una página web: análisis, diseño, programación, maquetación, posicionamiento, redes sociales, marketing online, alojamiento y gestión de servidores… lo que hace prácticamente imposible que una unica persona sea capaz de conocer a fondo todas y cada una de ellas. A tal punto, que por nuestra experiencia, no existe un diseñador gráfico bueno que sea un buen programador y viceversa, quizás porque son perfiles totalmente contrapuestos.

Quizás en este mundo es donde más existe la figura del «sobrino de», «familiar de», «amigo de» («hijo de»  ups perdón) que es informático o es diseñador y hace páginas web. Sin duda esta gente hace mucho daño al sector por varios motivos:

1.- Por ser competencia desleal: Los demás tenemos que pagar impuestos, hemos tenido que invertir en formación, gastarnos dinero en software, mantener una infraestructura…

2.- Por ser generadores de malas experiencias: cuando el «sobrino de», «lo que sea de», ha hecho una página web que:

– Si tiene mala programación carga lenta, da errores, no funciona.

– Si tiene mal diseño no tiene aceptación, esta obsoleta antes de publicarla, no crea marca del cliente.. no funciona.

– Si no esta optimizada para el posicionamiento: no aparece en buscadores, no mejora posiciones, no nos encuentran en la red… no funciona.

– Si no se preocupa del mantenimiento del servidor no cargará correctamente la página web, no se podrán hacer mejoras, no funcionará el correo… no funciona.

Y si no funciona el cliente recibe una mala experiencia llegando a pensar que internet no funciona para sus propósitos comerciales.

3.- Por devaluar el producto: tirando los precios por los suelos, pues para hacer las cosas mal no se requiere mucha inversión.

Sin embargo, y es en este punto donde ya no comulgamos con la opinión general al respecto, creemos que también tienen cosas positivas el hecho de que existan estos «intrusos». Lo sé, es querer ver la parte bonita de la historia:

Cuando todo el mundo tenga una página web, aunque sea mala, será cuando se empiecen a valorar las páginas web bien hechas pues será el hecho diferenciador entre unas u otras. Antiguamente nadie tenía coches, cuando empezaron a verse nadie se preguntaba que coche era mejor que otro, ni como estaban hechos, ni cuanto valían lo que importaba era si tenías o no tenías un coche. Cuando llegaron los utilitarios todo el mundo podía acceder a un coche más tarde o más temprano y se generalizó algo más su uso. Ahora que todo el mundo tiene coche, incluso más de uno, todos sabemos diferenciar el diseño de un ferrari de un ford, o podemos de alguna forma valorar mejor la mecánica de un mercedes sobre un fiat, todos sabemos las ventajas y desventajas de un diesel o un gasolina…

Cuando todo el mundo tenga presencia en internet (buena o mala) se empezarán a valorar las diferencias.

Nadie iría hoy en día a un sacamuelas teniendo dentistas profesionales, nadie dejaría el motor de su coche al «sobrino de» que hizo un curso de mecánica, acudiría a un taller profesional,  Nadie para un problema legal acudiría al «amigo de» que lee mucho y ha visto miles de veces Ally McBeal, seguro que acudiría a un abogado. Si acudimos a los profesionales en todos los aspectos de nuestra vida, ¿porque a la hora de hacer una web dejamos que nos la haga cualquiera?

 

 

 

2 Comentarios

Deja un Comentario